Síndrome del cuidador

¿Qué es el síndrome del cuidador quemado?

La sobrecarga del cuidador, también llamado síndrome del cuidador, afecta a dos tercios de los familiares que cuidan a personas mayores dependientes. Y es un estado de agotamiento físico, mental y emocional. Que está causado por las exigencias diarias que se imponen los mismos cuidadores.

La extensión del síndrome del cuidador quemado entre las cuidadoras es uno de los motivos por los que los familiares buscan una residencia de ancianos en Almería. Porque la salud de la cuidadora está en juego. Además, con la sobrecarga en los cuidados disminuye la capacidad para atender a la persona dependiente.

Consecuencias de la sobrecarga en los cuidados

1. Problemas del sueño. Ya que la ansiedad y el estrés provocan que la mente no desconecte al llegar la hora de dormir. El insomnio aparece al comienzo y puede causar otros síntomas.
2. Cansancio persistente. Como no se descansa lo suficiente, hay una sensación constante de cansancio.
3. Irritabilidad. Al sentirse sobrepasado, un cuidador comienza a tener reacciones más iracundas con sus seres queridos.
4. Aislamiento social. Como el tiempo para la atención de una persona dependiente no hace más que subir. La mayoría de las cuidadoras tienen que renunciar a su trabajo, a realizar actividades de ocio y a perder amistades.

¿Cómo prevenir el síndrome del cuidador?

1. Información. Cuanta más información tiene el cuidador sobre la enfermedad del anciano dependiente. Mejor puede reaccionar ante los retos que tienen los cuidados.
2. Aprender a pedir ayuda. Para pedir ayuda la persona cuidadora tiene que reconocer que está sobrepasada. Después de eso, tiene que renunciar a realizar todos los cuidados. Y ser consciente del daño que la sobrecarga causa a su salud y a sus relaciones.
3. Sentimientos y culpa. Reconocer y expresar los sentimientos es una parte fundamental para evitar la sobrecarga. Hay que aprender a gestionar estos sentimientos. En especial el sentimiento de culpa que surge cuando se delega el cuidado de la persona mayor. Por ejemplo, cuando se hace el ingreso del anciano en una residencia para mayores en Almería.
4. Aprender a manejar a la persona dependiente. Ya que los cuidados para pacientes avanzados de Alzheimer, por ejemplo, requieren de acciones específicas. Muchas veces se necesitan cuidados profesionales.
5. Dedicar tiempo para el cuidado personal. Como se produce una reducción de las relaciones personales y un deterioro de la salud. Para evitar el síndrome del cuidador quemado es importante mantener los lazos familiares, cuidar las relaciones sociales con los amigos y dedicar tiempo a cuidar la salud propia.

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